Como todo comienzo de año, hay dos meses importantes, enero y marzo.
En enero, lógicamente comienza el año, y las expectativas se renuevan. Marzo es un mes, diríamos bisagra. En ese mes, las calles de la ciudad se vuelven a pintar de blanco, a través de los delantales de los niños, que para esa época los tienen más blancos que nunca. Los distintos uniformes de los colegios secundarios, comienzan a darle color a las mañanas a primera hora, como al mediodía y también a la media tarde. Los jóvenes que asisten a carreras terciarias y universitarias le suman su impronta a una ciudad que ya no descansa. Marzo es un mes donde todo comienza con todo. Lo que venía de Enero y Febrero, en un andar tranquilo, parece ser que en marzo, ponen quinta y a fondo.
Este marzo es un nuevo comienzo para Horizonte, “Donde el Cielo se une con la Tierra”. Por tercer año consecutivo, la propuesta radial, nuevamente sale al aire. Nos volvemos encontrar en este tiempo de 11 a 13 todos los domingos, a través de distintos medios: como son Internet, la sintonía del 101.7, facebook, otras redes sociales, etc.
Esta propuesta busca sumarte a vos, a vos y a vos, para que los domingos, que normalmente es un día tranquilo, en donde muchos paran la pelota, bajan un cambio, puedas reflexionar en los valores. La propuesta como hace 79 programas atrás; es la misma: hablar de valores y principios. Nosotros creemos que esto, que el mundo vive como normal, no es bueno. Muchos, a lo malo llaman bueno, y a lo bueno malo. Todo se ha tergiversado. Pero creemos que esto se tiene que cambiar, se va a cambiar. Nosotros nos jugamos por los jóvenes, estamos seguros que en ellos está el cambio.
Si DIOS quiere, este año superaremos los cien (100) programas de esta propuesta en donde el oyente es protagonista; porque para eso es el programa para detenernos un instante y repensar la jugada; ubicarnos con los pies en la tierra pero con la mirada en el Horizonte, si allí donde el cielo se une con la tierra.
Ahora una perlita:
El equipo de Horizonte, que entre miradas cómplices, señas, sonrisas y ruidos disimulados, se preparó para dar comienzo a una nueva edición.
Las hojas ya sobre la mesa de tela aterciopelada esperan a ser leídas y que alguna vez se siga el guión, nos avisan que está todo listo… que comienza la emoción.
Al igual que las hojas en la mesa, están los sentimientos, creencias, convicciones y principios; que combinados son la razón por la que este domingo estamos aquí.
El cartel de “Aire” se ilumina de rojo. El operador mira como queriendo transmitir seguridad. El micrófono está encendido, se escucha el vacío del silencio que se interrumpe cuando el locutor saluda con su habitual “Buenos días, Ciudad”.
Cada vez que sucede esto, un nuevo tiempo comienza, un nuevo aire se respira. A pesar de que vamos por el 3er. Año consecutivo, los nervios del “primer día” se hacen sentir. Cada uno tiene una vasija llena de cosas para dar, pero cada uno está en la búsqueda del cuándo y cómo.
De a poco nos vamos soltando, el cariño de la audiencia se hace sentir. La familia del otro lado nos alienta a seguir. Un simple “Buen día, que bueno escucharlos”, nos es más que suficiente. Entre tantas cosas, por rato se nos olvida el tiempo.
Y eso en radio es todo un logro. No dejarte limitar por el tiempo, pero tampoco subestimarlo.
Esto es Horizonte, ese es el corazón de Horizonte. Gracias por elegirnos una vez más. El agradecimiento es a vos, es a Ud.; que domingo a domingo, se suma a este espacio que fue creado para hablar de valores, porque como dice la publicidad… hablar de valores… Vale.
Fundación Alas de Águila
