domingo, 8 de noviembre de 2015

INJUSTICIA

El pasado miércoles se jugó la final de la Copa Argentina entre Boca Juniors y Rosario Central. El partido finalizó 2 a 0 a favor de Boca, consagrándose así como campeón de la edición 2015.
Ahora bien, leyendo así la crónica parecería que todo fue normal, pero cuando nos adentramos en el encuentro podemos observar que el mismo estuvo plagado de irregularidades de parte del árbitro Diego Ceballos en colaboración del línea Marcelo Aumente. Basta decir que los dos goles de Boca fueron totalmente anormales. No vamos a ahondar en los detalles futbolísticos, pero sí en las actitudes. Hasta este partido tanto los dirigentes de Boca como de Central estaban de acuerdo con Ceballos, porque cuando él los dirigió a los clubes les había ido bien… habían ganado. (¿hum…?) 
Ahora bien Ceballos, aparentemente, en cada fallo decidió a favor de Boca perjudicando totalmente a Central. Hoy los dirigentes de Central, poco más, quieren ejecutar a Ceballos en el monumento a la Bandera, pero se olvidan que con él, durante gran parte del Nacional B fueron favorecidos con inexplicables penales o expulsiones sin sentido de jugadores contrarios. Parecería ser que Ceballos ayudaba a algunos equipos, por ello los dos clubes lo eligieron a pesar de no ser el mejor árbitro del fútbol argentino, es más, corroborado por sus mismos colegas, este referee no pasa de ser uno del montón, pero que algunos clubes siempre lo eligen para dirigir. Raro, no?
No podemos decir que es un árbitro corrupto, porque para ello deberíamos tener pruebas, pero la verdad no deberíamos sorprendernos que en el arbitraje pasen cosas oscuras, pues Ceballos no vino en un OVNI, ni tiene nacionalidad polaca o esloveña. ¡No! Ceballos es argentino y ello conlleva a pensar que todo puede pasar, o acaso, no se murió un fiscal de la Nación y no se sabe a la fecha, si se suicidó o lo mataron; o acaso jueces federales no cambian sus sentencias de un día para otro sin una aparente razón, o diputados y senadores quienes habían expresado que no votarían, por ejemplo, la ley de matrimonio igualitario, después terminaron votando positivamente, posterior a una visita a un barco extranjero en donde parece que algo les cambió la voluntad?; o periodistas que antes pensaban y expresaban de una manera y después, por alguna razón del cosmos, cambian sus ideologías como alguien se cambia un par de medias; o un juez renombrado por su actividad contra el narcotráfico, aparentemente sería el jefe de un cartel y sus mismos colegas lo denunciaron ante la Corte Suprema de la Nación, para que éste, no sea parte de la Comisión de Jueces Antinarcos, donde lo iban a nombrar?
Somos un país donde lamentablemente la injusticia está a cada paso pero todo está saliendo a la luz, en todos los ámbitos.
Ahora bien, ¿que puedo hacer yo con esto? 
La decisión pasa por cada uno de nosotros. Si cada uno aplica desde su lugar la justicia entonces esto se hará extensivo a otros y así se comenzará a cambiar algo que en la actualidad, tristemente se ve como normal.
Si se debe rescatar de este hecho futbolístico, por ejemplo palabras de Mario Pergolini, candidato a vicepresidente de Boca y un personaje público, conductor y empresario. Él le expresó a su hijo: “ganar así, no está bien, no da ganas de festejar” y que importante ver que una integrante de Alas de Águila, simpatizante de Boca (tiene su foto de perfil en la Bombonera), expresó en su muro de facebook: “Las injusticias, no se festejan”.
A pesar de que todo parece malo, hay una luz que está comenzando a brillar cada día más y las cosas ocultas están saliendo a esa luz. Todo va a cambiar, lo declaramos por nuestros hijos, nuestros nietos, por las generaciones. Así será.

Fundación Alas de Águila
Por una Juventud con Valores