lunes, 21 de marzo de 2011

Libia, el centro de atención del mundo

Pensamos que la guerra, la violencia, la intolerancia no es el camino para arreglar las diferencias. Hoy estos países aliados, bombardean zonas civiles de Libia, con el único motivo (dicen) de que Muamar Gaddafi sea derrocado debido a como trata a su pueblo civil. Si no hubiera muertes, hasta podría parecer gracioso.

Ellos avanzan en contra de este personaje, con las mismas armas y políticas que él usa contra su pueblo, matando a civiles, que dicen defender. Es muy irónico, suena algo así como: “Por la PAZ, vamos a la Guerra”. Simplemente un disparate.

La población mundial tiene un ojo en este conflicto y no deja de mirar con el otro, lo que sucede en Japón y esto sí, nada tiene que ver con intolerancia o violencia humana. Cuánto dinero, cuántas vidas, se van a perder por divergencias de pensamiento o de accionar, recursos que bien podrían ser usados para ayudar a nuestros hermanos nipones (y digo hermanos, porque vivimos en la misma casa que es nuestro planeta).
Nos preguntamos si actuarían de igual manera si esto sucediera en algún país pobre de la ex URSS o de Latino-américa con escasos recursos, pero es simplemente un pensamiento.

Estas situaciones deforman el pensamiento sobre valores. ¿Cómo podremos decirles a nuestras generaciones venideras que a la violencia hay que “combatirla” con paz; que a las diferencias hay que dejarlas de lado y buscar lo que nos une; que al odio le gana siempre el amor? Nosotros creemos en que se puede cambiar. Esta situación no ayuda, es verdad, pero SI SE PUEDE, SI SE PUEDE.

Necesitamos un cambio, en donde el antivalor TENER, de lugar al valor SER, les aseguramos que el mundo lo va a agradecer.

FUNDACION ALAS DE ÁGUILA